Caer y volar

Para subir, hay que bajar. Lo mismo que para volar hay que caer, una y otra vez, hasta que aprendes a hacerlo bien. 
No puedes esperar siempre que las cosas te salgan bien a la primera: la perseverancia y el trabajo duro son los dos motores que harán posible tu ascenso a las maravillas que se ocultan en el firmamento. 
Si te caes, lánzate de nuevo desde el acantilado sin dudas, sin miedo: mójate si es lo que necesitas pero nunca te rindas. Porque si te rindes, lo pierdes todo. 
Y un pequeño fracaso de cuando en cuando es una fortaleza para el carácter.
No satanices tu miedo y hazle frente, aceptándolo como parte de ti. Sólo así te alzarás de tus cenizas y catarás la libertad: en el momento que entiendas esta verdad.

Comentarios

  1. Me gusta tu blog
    Se entiende lo que quieres decir no como en otros blogs que sus textos son tan adornados que no captas el mensaje
    Te sigo y en twitter tambien @SrtaAburrida
    Un beso desde http://grannecesidaddeescribir.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegro de que te guste. Siempre escribo intentando mostrar mi perspectiva de forma que se entienda claramente.
      Muchas gracias por animarte a comentar, un beso enorme.
      Te sigo también en Twitter: @Sau_ken92

      Eliminar

Publicar un comentario

Comenta si tienes tiempo y si quieres, de otra manera...¡da lo mismo!

Entradas populares de este blog

Lucero del alba

Una mentira nunca vive hasta hacerse vieja

Para ver el mundo en un grano de arena...